No sabemos cuándo comenzará.
Pero un día, sin aviso, algo dentro de ti podría despertarse.
No me refiero a un una habilidad técnica o alguna idea brillante, aunque esas cosas también podrían aparecer.
Me refiero a una voz suave, antigua, que te susurra desde lo profundo con amor y sabiduría:
«Hay algo más que viniste a recordar.»
Durante la última gira en España, acompañé a muchas almas valientes que sintieron esa llamada.
Algunas decían:
«Se me reactivó mi capacidad de canalizar».
«Todo me hizo sentido. Entendí el propósito divino de mi vida».
«Ahora puedo confiar en mí, en mis decisiones, en mi camino».
No fue algo que se yo les haya enseñado. Sería irresponsable de mi parte decir eso.
Pero con mucha atención estoy haciendo seguimiento a una sensible ola de despertar en mi tribu a raíz del trabajo interno y el empoderamiento espiritual.
✨ Los dones no siempre se sienten como dones al principio
A veces aparecen como caos.
Como crisis.
Como una sensación de que tu antigua forma de ser ya no encaja.
Y es ahí donde se abren las grietas por donde entra la luz. Es como si la vasija se fracturara antes de ampliarse.
He visto cómo muchos descubren sus talentos justo cuando se sienten perdidos.
Porque en realidad no están perdidos,
están recordando el verdadero camino hacia sí mismos.
Algunos dones llegan con heridas. La herida es en verdad un portal, la guía para recorrer el camino de sanación, el Leit Motiv que va generando las repeticiones en la trama para lograr el aprendizaje del alma.
Si eliges atravesar ese portal, se revela una fuerza que siempre estuvo en ti.
Esto lo he visto muchas veces en mi terapia 1 a 1 y mis retiros.
🌀 El alma es multidimensional: tú también lo eres
Para mí, la multidimensionalidad no es un concepto esotérico.
Es tu estado natural.
Lo que eres cuando dejas de creer que eres solo este cuerpo, esta historia, este momento.
Eres muchas versiones.
Eres tu infancia y tu adultez, tus ancestros y tu futuro.
Habitas múltiples líneas de tiempo.
Y cuando haces el trabajo interno —la sanación, el perdón, la liberación—
empiezas a cruzar los velos entre esas dimensiones.
Si, te vuelves alguien “mejor”, pero no desde el Ego competitivo que busca ganar mientras otros pierden, si no desde el recordar quién eres cuando estás despierto.
🧘♂️ ¿Cómo activar lo que duerme en ti?
Hay caminos.
Yo acompaño desde lo simbólico y lo vivencial.
En mi práctica personal y con quienes caminan conmigo, uso herramientas como:
- Meditación para silenciar el ruido del mundo externo.
- Recapitulación tolteca para liberar energía atrapada en el pasado.
- Repotenciaciones energéticas para armonizar el campo y abrir canales.
- Terapia y acompañamiento para deshacer los nudos emocionales.
Pero todo parte de un primer acto profundo:
Escuchar el susurro.
Sin descartarlo, sin hacerlo pequeño, sin negarlo.
Nunca estaremos completamente “listos” para algo así.
Debemos confiar y atender ese susurro interior.
Cuando estás en tribu, tienes muchos espejos que te muestran luces y sombras… que te acompañan
Hay partes del camino que debemos recorrerlo junto a otros que también están en la misma búsqueda profunda.
Así lo dijeron algunos de quienes caminaron en retiros de España este año:
“Sanar acompañado es indispensable e invaluable.”
“Siento un desbloqueo… un antes y un después que merece la pena vivir.”
Este camino no es lineal, es en espiral, y siempre vamos más adentro y más al centro.
Tu camino podría empezar con una llamada silenciosa.
Una voz que no viene de afuera.
Viene de ti.
De tu alma.
De esa parte que ya sabe quién eres… y solo espera que lo recuerdes.
Si te gustó este tema, no olvides escuchar el último episodio de mi Podcast La escuela del todo. Aquí te dejo una nota resumen con los puntos más resaltantes.
Waaao ! He escuchado esa voz 2 veces, apenas despierto y también 2 veces al casi quedarme dormida ver mi cuerpo en la cama pero me da miedo . Esto me está sucediendo después de la muerte de mi madre
Querida Yinet. Te abrazo con cariño. Muchas veces, la partida de nuestros seres queridos despierta dones porque los lazos de amor son más fuertes que la vida y la muerte. Aunque es posible que el dolor al principio no nos permita verlo, es un regalo de la vida ese proceso de despertar.
Bendiciones para ti.