La Kundalini de la tierra y el vuelo del águila y el cóndor

Esta semana en La escuela del todo Podcast

La energía Kundalini de la tierra despierta y se muda de un lugar a otro del planeta en cada era. Son ciclos de varios miles de años.

Es un faro de luz que hace que los pueblos canalicen nuevas formas de su espiritualidad, a veces en forma de religiones y otras veces simplemente prácticas para el despertar.

Hace más de 10 mil años esa energía se estableció en el Tíbet, y por eso surgieron entre India y Medio Oriente los seres iluminados que inspiraron a las religiones de los últimos miles de años: Buda, Jesús, Khrishna, Maoma.

Esa energía se ha movido, como lo han dicho grandes maestros, hacia Los Andes, que recorren Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Chile y Argentina.

La energía Kundalini en esta zona está generando movimientos de todo tipo que apuntan al renacimiento de una espiritualidad suramericana, más vinculada a la tierra, a la Pachamama, una espiritualidad que conecta con el corazón y la sabiduría de los pueblos nativos.

Este movimiento prepara un nuevo tiempo. Se trata de la profecía del águila y el cóndor, que conocen desde hace miles de años los pueblos originarios desde sur hasta el norte de Las Américas. Desde los mapuches de Chile, pasando por los Kogi y los Arauacos de Colombia, o los piaroa en Venezuela, hasta los Oglala, los Cherokee, las etnias de Tao Pueblo o los Hopi, todos conocen esta profecía: “El águila y el cóndor volarán juntos en el cielo, lo que traerá paz y prosperidad a la humanidad”.

El águila simboliza lo racional y la energía masculina del norte. El cóndor, la intuición y la energía femenina del sur.

Se dice que el águila se volvería tan fuerte que casi borraría al cóndor. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.

Pero el destino no termina ahí. Cuando vuelen juntos, la humanidad regresará a la naturaleza. Su unión elevará la consciencia colectiva hacia un mundo más próspero y espiritualmente sano.

Es la integración de los opuestos. El equilibrio cósmico. La humanidad reencontrándose consigo misma.

Pero ¿Qué tiene que ver todo esto con nosotros, nuestros asuntos, la cotidianidad, el día a día o el estrés que podemos vivir con la vida en general?

¿Qué tiene que ver la energía kundalini con el despertar individual?

Pues, cada uno de nosotros es un fractal del planeta.

La Kundalini también es una energía que se despierta en nosotros. Se enrosca en la base de la columna y se puede experimentar que desde allí fluye hacia arriba, va despertando los chakras hacia la cabeza, en donde se expande la consciencia. Se asocia al yoga y prácticas de meditación, porque despertar esta energía es una meta, o un objetivo.

Los desafíos de la vida, como lo hablamos en el episodio #2 de La escuela del todo Podcast, representan esos retos que nuestra alma ha elegido para evolucionar espiritualmente, y superarlos, empoderarnos y hacer un camino interior nos ayudará a vivir este proceso de despertar eventualmente.

En todos los caminos ancestrales nos han dejado esta especia de mapa que los habla de la Kundalini.

Las símbolos antiguos como el caduceo de mercurio en Grecia, que hoy en día es el símbolo de la medicina, la serpiente emplumada o Quetzalcóatl en México, la cruz chakana de los pueblos andinos que comienza en el sur con la serpiente y termina en el este con el cóndor, son mapas antiguos que nos narran este viaje de la serpiente hacia el ave.

Es el viaje de la evolución y el despertar de la energía Kundalini. Y fíjate que también nos muestra un mapa del cerebro, comenzando en el reptil, pasando por el limbico y terminando en el córtex.

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